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¿Que es la economia circular?
La economía circular ya ha pasado a formar parte de la lista de temas a tener en cuenta hoy en día, pero aún no está en la agenda de todas las instituciones y administraciones; si sólo algunas empresas empiezan a despertar para ello, y mucho menos las personas.
La economía circular es un concepto que propone romper la linealidad en la que la humanidad ha ido creando cadenas de valor que generan productos no reembolsables en ciclos naturales. Cambiar este paradigma no es sólo un gran desafío económico -que lo es-, sino un gran desafío cultural. La batalla por una economía circular es tanto cultural como económica. El requisito de preferir los nutrientes naturales en lugar de los artificiales es individual y corporativo; la capacidad de reciclar los desechos también. Lo mismo ocurre con las opciones de movilidad. Pero, tanto la perspectiva personal como la corporativa están entrelazadas en el mercado, y se mueven en marcos legales que deben jugar un papel decisivo en la circularidad sostenible, a nivel local y global.
La economía circular debe contar con la participación de todos nosotros: desde ciudadanos anónimos, pasando por las PYME, las corporaciones, las ONG, los municipios y el Gobierno. Se trata de un nuevo paradigma que debe ser aterrizado. Cada día vemos más y más experiencias de empresas, ciudades, universidades; demostrando que vamos por el buen camino pero, al mismo tiempo, que debemos ir más rápido, en el ritmo de la sostenibilidad. Es fundamental que la economía circular vaya más rápido que el deterioro de la Tierra y esto implica cambios en las agendas locales y en los mercados globales.
Debe ser un cambio económico y cultural. El primer paso es informar y educar, para que la gente pueda ser consciente, entender la necesidad y ser parte del cambio. Esta es también una nueva oportunidad para encontrar nuevas ocupaciones. El informe Tendencias Sectoriales Europeas: la próxima década (CEDEFOP 2016) afirma que "se espera que el avance tecnológico, a través de desarrollos como la automatización y el impacto de la "Internet de los objetos", a veces denominada la cuarta revolución industrial, tenga efectos importantes y duraderos en el contenido y las tareas del trabajo. La automatización, mediante robots e inteligencia artificial, ya está sustituyendo a las tareas rutinarias (...). Estos cambios exigen cada vez más que las personas asuman tareas más complejas que combinan competencias técnicas y genéricas (...) El paso a una economía más ecológica y sostenible aumentará la demanda de competencias y empleos ecológicos en todos los sectores”
La Economía Circular es, de hecho, un cambio de vida: a la Tierra y a nuestra propia vida.
La economía circular es un concepto que propone romper la linealidad en la que la humanidad ha ido creando cadenas de valor que generan productos no reembolsables en ciclos naturales. Cambiar este paradigma no es sólo un gran desafío económico -que lo es-, sino un gran desafío cultural. La batalla por una economía circular es tanto cultural como económica. El requisito de preferir los nutrientes naturales en lugar de los artificiales es individual y corporativo; la capacidad de reciclar los desechos también. Lo mismo ocurre con las opciones de movilidad. Pero, tanto la perspectiva personal como la corporativa están entrelazadas en el mercado, y se mueven en marcos legales que deben jugar un papel decisivo en la circularidad sostenible, a nivel local y global.
La economía circular debe contar con la participación de todos nosotros: desde ciudadanos anónimos, pasando por las PYME, las corporaciones, las ONG, los municipios y el Gobierno. Se trata de un nuevo paradigma que debe ser aterrizado. Cada día vemos más y más experiencias de empresas, ciudades, universidades; demostrando que vamos por el buen camino pero, al mismo tiempo, que debemos ir más rápido, en el ritmo de la sostenibilidad. Es fundamental que la economía circular vaya más rápido que el deterioro de la Tierra y esto implica cambios en las agendas locales y en los mercados globales.
Debe ser un cambio económico y cultural. El primer paso es informar y educar, para que la gente pueda ser consciente, entender la necesidad y ser parte del cambio. Esta es también una nueva oportunidad para encontrar nuevas ocupaciones. El informe Tendencias Sectoriales Europeas: la próxima década (CEDEFOP 2016) afirma que "se espera que el avance tecnológico, a través de desarrollos como la automatización y el impacto de la "Internet de los objetos", a veces denominada la cuarta revolución industrial, tenga efectos importantes y duraderos en el contenido y las tareas del trabajo. La automatización, mediante robots e inteligencia artificial, ya está sustituyendo a las tareas rutinarias (...). Estos cambios exigen cada vez más que las personas asuman tareas más complejas que combinan competencias técnicas y genéricas (...) El paso a una economía más ecológica y sostenible aumentará la demanda de competencias y empleos ecológicos en todos los sectores”
La Economía Circular es, de hecho, un cambio de vida: a la Tierra y a nuestra propia vida.
